Las Infraestructuras Comunes de Telecomunicaciones (ICT): qué son, sus ventajas y su relación con la domótica

A la hora de plantear un proyecto constructivo, cuestiones como la estética y la funcionalidad son cruciales para establecer unos pilares básicos. Las Infraestructuras Comunes de Telecomunicaciones (ICT) aportan ese aspecto tecnológico que pueden llegar a potenciar la visión del profesional a cargo de la construcción al ofrecer una infraestructura preparada para adaptarse a las innovaciones futuras. Hablamos sobre qué son, sus ventajas y su relación con la domótica:

Pensadas para garantizar que los ocupantes de un edificio puedan acceder a una variedad de prestaciones como telefonía fija, televisión o internet, las ICT son los sistemas y componentes que permiten la distribución de estos servicios de telecomunicaciones dentro de edificios o conjuntos de edificaciones, como urbanizaciones, hoteles, oficinas, etc. 

Las ICT están compuestas por:

• Red de cableado estructurado para llevar la señal a todos los puntos de acceso de la edificación.
• Registros y canalizaciones por donde pasan los cables y se alojan los dispositivos necesarios para las conexiones.
• Puntos de acceso al operador donde la red de telecomunicaciones pública se conecta con la infraestructura interna del edificio.
• Distribuidor general que centraliza las señales y las distribuye hacia las diferentes unidades dentro del edificio.
• Racks o armarios de telecomunicaciones destinados a albergar equipos activos y pasivos necesarios para el funcionamiento de la red. 
• Tomas terminales en las edificaciones donde los usuarios conectan los dispositivos para acceder a los servicios de telecomunicación. 

Cruciales para el mundo moderno, las ICT facilitan la implementación de nuevas tecnologías y servicios, y contribuyen a la digitalización y conectividad. 

La implantación de una ICT adecuada trae consigo innumerables ventajas desde el punto de vista de los servicios de telecomunicación:

• Conectividad de alta velocidad: Gracias a la fibra óptica, es posible acceder a velocidades de conexión antes impensables.

• Versatilidad: Las ICT permiten adaptarse a diferentes servicios, ya sea televisión, internet o telefonía.

• Reducción de costos a largo plazo: Una vez instalada, la infraestructura puede adaptarse a nuevas tecnologías sin grandes inversiones.

• Mayor valor del inmueble: Una propiedad con una ICT moderna y eficiente es más atractiva para posibles compradores o arrendatarios.

La relación entre ambas tecnologías es complementaria. Mientras que las ICT se encargan de asegurar que la infraestructura de telecomunicaciones sea adecuada y capaz de manejar las necesidades actuales y futuras de comunicación, la domótica se beneficia de dicha infraestructura para interconectar los dispositivos y sistemas inteligentes dentro del hogar o edificio. 

Además de esto, las ICT permiten:

• Que los sistemas de domótica se conecten a Internet y a otras redes, lo que es crucial para la funcionalidad de muchos sistemas de domótica que pueden ser controlados de forma remota.
• Garantizar que haya un estándar en el cableado y las conexiones, lo que facilita la integración de diferentes sistemas de domótica, independientemente del proveedor.
• Que los servicios como la seguridad, el monitoreo remoto, la automatización del entretenimiento en el hogar, y otros servicios domóticos pueden operar sobre una plataforma de comunicación confiable y segura.
• Actualizaciones y cambios sin grandes intervenciones en la infraestructura para soportar nuevas tecnologías, como la IoT (Internet de las Cosas) a medida que evolucionan las necesidades de la domótica.

Tener una ICT robusta y bien diseñada es un requisito esencial que permite la operatividad de los sistemas de domótica. Incluir esta tecnología en las construcciones es un paso más para alcanzar la máxima conectividad. Si eres profesional de la construcción y te interesa conocer más en profundidad cómo encaja las ICT en tu proyecto, puedes ponerte en contacto con nosotros en info@domonova.com